Armas usadas en crímenes llegan legales de EU
Un alto porcentaje de las armas que alimentan al crimen organizado en México llegan legales. Y en su mayoría vienen desde Estados Unidos. El problema es que las autoridades lo saben y no hacen nada: ni tienen un sistema de rastreo de armas, ni atacan los lugares de tráfico. Y no hacen nada aunque hay sospechas de que muchas de esas armas podrían estar siendo filtradas a los criminales desde las Fuerzas Armadas.
A esa conclusión llega un amplio análisis realizado por dos expertos internacionales en tráfico de armas, resumido en un ensayo que dio ayer a conocer el Global Post.
“Autoridades militares y policiales mexicanas mantienen una guerra con las organizaciones de tráfico de drogas del país. Y la lucha aún no va bien. Desde 2006, el conflicto ha generado un máximo de 164 mil 345 muertes de civiles. Los expertos siguen sin ponerse de acuerdo si los asesinatos van hacia arriba o hacia abajo”, dicen los autores del estudio, Robert Muggah y Nathan B. Thompson. “Más mexicanos han muerto violentamente en la última década que los civiles afganos o iraquíes durante el mismo período, combinados. Armas de alta potencia, junto con las armas de mano, está jugando un papel clave en el impulso de la violencia”.
Muggah es director del Igarapé Institute en Río de Janeiro, director de SecDev Foundation y miembro del World Economic Forum. Nathan B. Thompson es investigador del Igarapé Institute.
“Otros analistas sostienen que parte de las armas de tipo militar que usan los criminales vienen de los conflictos centroamericanos de las décadas de 1970 y 80. También tienen parte de razón”.