“Plan Fortaleza”: efectividad y riesgos

22/03/2018
Por Katherine Aguirre Tobón
Publicado originalmente en El País Cali

El Plan Fortaleza es un eje importante de la actual política de seguridad de la ciudad. Éste parte de unas instituciones de seguridad fuertes y con presencia en el territorio, donde la policía cuenta con un apoyo del Ejercito en una ofensiva contra la delincuencia. La estrategia se basa también en un fuerte componente mediático, lo cual debería tener un impacto en la percepción de la seguridad.

Los resultados de la estrategia se han identificado por la Alcaldía como muy positivos. Se adjudica a la medida, que en febrero se registrara la tasa de homicidios más baja registrada, así como el aumento de capturas e incautaciones. Es evidente que una efectiva coordinación entre las fuerzas de seguridad y una juiciosa focalización dan resultados.

Aún con este despliegue, tuvimos el fin de semana más violento del año. La estrategia no es infalible, ni sostenible. Es necesario tener una visión crítica de la medida. El Plan Fortaleza parte de un elemento de reacción. Ante la ausencia actual de un Plan de Seguridad, no hay claridad de cómo la estrategia se plantea como una medida temporal, de choque, o como algo permanente.

El alcalde ha afirmado que el Plan es para “proteger a las personas de bien”. La separación de personas de bien y delincuentes, así como el enfoque donde prima fundamentalmente el mantenimiento de la ley y el orden, no son elementos deseados de una política de seguridad. Tenemos muchos espejos en la región: Centroamérica, México y Rio de Janeiro enfrentan actualmente altos niveles de militarización, los cuales han derivado, en graves violaciones de los Derechos Humanos. Hay que evitar a toda costa caer en el enfoque de “mano dura”, el cual no funciona y es dañino. Conocemos de muchos esfuerzos de prevención en la Alcaldía, los cuales deben ser fortalecidos, en conjunto con un estudio profundo de las causas de la violencia en la ciudad.